La vista que quita el aliento

Despertar con la vista impresionante sobre Venecia fue mágico. El desayuno ofrecía muchas opciones, incluyendo un chef de omelettes muy entretenido, que hacía que cada mañana fuera especial.

Sin embargo, el servicio de limpieza no fue el mejor. nos dejaron toallas sucias y no hubo reposición a tiempo. La atención al detalle no estaba a la altura de un hotel de cinco estrellas.

El restaurante Dopolavoro, con su estrella Michelin, ofrece una experiencia culinaria que no se puede perder, especialmente las cenas al atardecer.

La piscina infinita, aunque espectacular, estaba a veces un poco llena y necesitaba más espacio para relajarse cómodamente.

La piscina infinita en el techo fue impresionante.

Recomiendo para parejas buscando escapadas romanticas

La piscina infinita en el techo fue espectacular, especialmente al atardecer. Además, el crew fue realmente increíble, se notaba que estaban bien entrenados para manejar todo tipo de situaciones, hasta me lograron un encendedor para mis puros!

No fue barato, pero aceptable.

la experiencia en la isla fue asombrosa, pero carece de opciones de playa.

La experiencia en la isla fue asombrosa, con un servicio impecable y un desayuno exquisito, destacando los sándwiches tostados que fueron un verdadero deleite. La habitación era un sueño, con un vestidor cómodo y un baño con opciones abiertas que brindaban una sensación de amplitud. Sin embargo, el acceso a la isla puede hacerse un poco complicado en temporadas altas y el spa, aunque agradable, estaba algo concurrido a determinadas horas. Los precios de las cenas son altos, lo que puede resultar un inconveniente si se busca algo más asequible.

definitivamente volvería a reservarlo

Llegamos y el personal se mostró super amable. Las habitaciones eran impecables con aire acondicionado y minibar. El desayuno era abundante con todo tipo de comida deliciosa. La alberca familiar está rodeada de un jardín gigante y tiene un bar con buen servicio. ¡No se pongan a perderse el spa, tienen masajes increíbles!

El hotel tiene una vista impresionante desde la isla de la Rosa hacia Venecia. Las habitaciones son cómodas y el restaurante en el cuarto piso ofrece comidas excepcionales con vistas panorámicas a la ciudad. Además, el desayuno es generoso, lleno de opciones de alta calidad, y el servicio de traslado gratuito cada 30 minutos hacia la plaza de San Marcos es muy conveniente.

La isla puede sentirse un poco aislada si buscas bullicio y vida nocturna. Aunque la piscina es espectacular, puede llenarse rápidamente, lo que podría interrumpir el momento de relajación. Los precios de la cena son altos, entre 100 y 120 euros, lo que puede ser un poco excesivo si se busca un viaje más económico.

Tuvimos una experiencia increíble con amigos en este resort. La isla fue perfecta para relajarnos, lejos del bullicio. Nos encantó el servicio de transporte gratuito cada 30 minutos, facilitando explorar la ciudad. Además, disfrutamos de las clases de cocina y de las sesiones de yoga en los jardines.

El único inconveniente fue que, a veces, había que esperar bastante tiempo por el transporte de regreso, especialmente en horarios pico.

Maravillosa estancia. Personal sempre amable, habitación ampla e limpeza impecable. Transporte a San Marco sin problemas. Piscina na terraza cunhas vistas espectaculares, ideal para relaxar despois de pasear. O único malo, agardar moito polas maletas á chegada. Pero a experiencia merece a pena!

Pasamos un tiempo increíble en este lugar. La habitación tenía una pequeña terraza, perfecta para relajarse con una copa. El desayuno incluía una variedad impresionante de opciones y un chef para omelettes. Cada interacción con el personal fue agradable, haciéndonos sentir especiales. Definitivamente volveríamos a disfrutar de sus jardines.